Qué es el lupus eritematoso sistémico
El lupus eritematoso sistémico es una enfermedad autoinmunitaria que hace que el sistema inmunitario ataque sus propias células y tejidos. Puede afectar las articulaciones y el sistema nervioso. También puede afectar los vasos sanguíneos. Además, pueden verse afectados los órganos, como la piel, los riñones, los pulmones y el cerebro. Esta afección causa erupciones cutáneas, cansancio extremo (fatiga) dolor y fiebre. El lupus grave puede dañar los órganos y causar otros problemas graves, incluida la muerte.
El lupus es una enfermedad crónica. Puede ser de leve a grave. Es más común en mujeres adultas jóvenes. Sin embargo, puede presentarse en personas de cualquier edad.
Aún no se conoce la cura para esta enfermedad. Pero los medicamentos pueden ayudar a controlar los síntomas. Usted también puede ayudar a manejar el lupus llevando un estilo de vida sano y trabajando con el proveedor de atención médica.
¿Cuáles son las causas del lupus?
El sistema inmunitario produce proteínas llamadas anticuerpos. Los anticuerpos protegen el organismo contra las bacterias, los virus, los cuerpos extraños y las células cancerosas. En algunas personas, el sistema inmunitario produce anticuerpos que atacan las células y tejidos del propio cuerpo. En consecuencia, la persona tiene inflamación y daños en los tejidos del cuerpo. Esto sucede con el lupus y algunas otras enfermedades autoinmunitarias.
Se desconoce la causa del lupus. Pero es posible que los factores genéticos y otros tipos de factores, como determinados virus y alergias, tengan un papel importante.
Síntomas
El lupus puede aparecer en muchas partes del cuerpo. Por este motivo, puede afectar a las personas de diferentes maneras. Es probable que usted tenga solamente algunos de los síntomas. Es decir, quizás no tenga todos ellos. Estos son algunos de los síntomas más frecuentes del lupus:
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Fatiga
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Fiebre
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Llagas en la boca o la nariz
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Caída del cabello por zonas
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Salpullido en forma de mariposa en las mejillas
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Sarpullidos provocados por la luz solar
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Articulaciones hinchadas o adoloridas (artritis)
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Dolor muscular
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Pérdida de peso
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Acidez (reflujo ácido)
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Dolor de estómago
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Menos flujo de sangre en los dedos de las manos y los pies
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Dolores de cabeza
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Mareos
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Cantidades anormales de células sanguíneas
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Formación de moretones o sangrado
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Depresión
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Confusión
Los síntomas graves incluyen:
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Hinchazón de las piernas y los tobillos (edema)
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Inflamación del tejido alrededor de los pulmones que causa dolor de pecho al respirar (pleuresía)
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Inflamación del recubrimiento del corazón (pericarditis)
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Convulsiones
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Problemas en los riñones
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Aborto espontáneo
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Cantidades anormales de células sanguíneas
¿Qué es la remisión?
La remisión es cuando los síntomas desaparecen durante un período. El lupus puede entrar en una etapa de remisión. Si el lupus vuelve a presentarse, los síntomas pueden volver a ser los mismos de antes.
Posibles complicaciones del lupus
Con el tiempo, el lupus puede causar daños en el cuerpo. Esto puede producirle problemas graves, como los siguientes:
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Enfermedad de los riñones (nefritis lúpica). Con el tiempo, esto puede causar insuficiencia renal. La insuficiencia renal se trata con diálisis o trasplante de riñón. La enfermedad de los riñones puede causar ciertos síntomas. Llame al proveedor de atención médica si tiene hinchazón en las manos, los pies o alrededor de los ojos. También informe al proveedor de atención médica si tiene cambios en la orina. Estos incluyen la necesidad de orinar con más frecuencia, dolor al orinar, burbujas excesivas en la orina u orina oscura.
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Arterias obstruidas (aterosclerosis). Esto aumenta el riesgo de que una persona tenga un ataque al corazón, insuficiencia cardíaca y ataque cerebral. Para ayudar a reducir los riesgos de estos problemas, usted puede hacer ciertos cambios en su estilo de vida. Deje de fumar, si lo hace. También mantenga controlada la presión arterial, la diabetes y el colesterol. Haga actividad y manténgase saludable.
Diagnóstico de lupus
A veces, es difícil diagnosticar el lupus. Esto se debe a que muchos posibles síntomas pueden tener otras causas. Además, los síntomas pueden presentarse lentamente con el transcurso del tiempo.
Para diagnosticar el lupus, el proveedor de atención médica le hará una exploración física. También le preguntará acerca de sus antecedentes médicos, los antecedentes médicos de su familia y sus síntomas. Le harán pruebas que ayudarán a confirmar el diagnóstico. Las pruebas pueden incluir lo siguiente:
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Análisis de anticuerpos. Estos análisis se realizan para detectar ciertos tipos de anticuerpos en la sangre. La principal prueba para el lupus es la de anticuerpos antinucleares (ANA, por sus siglas en inglés). La mayoría de las personas con lupus (el 97 %) tendrán un resultado positivo en esta prueba. Si la prueba de ANA es positiva, también pueden hacerse otras pruebas de anticuerpos.
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Hemograma completo (CBC, por sus siglas en inglés). Este análisis mide la cantidad de glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. Es posible que todos estos valores sean bajos. Es algo común en el lupus.
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Otros análisis de sangre. Podrían hacerse para detectar otros problemas, por ejemplo, evaluar cómo están funcionando determinados órganos. Algunos buscan signos de inflamación en el cuerpo. Otros buscan saber si hay ciertas clases de proteínas. O bien, muestran la rapidez con la que se coagula su sangre.
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Análisis de orina. Se hacen para buscar sangre o proteínas en la orina. Esto puede significar que sus riñones no están funcionando con normalidad.
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Biopsias. En la biopsia, se toman muestras pequeñas de tejido de la zona afectada y se examinan con un microscopio. Para buscar los signos de lupus, pueden hacerse biopsias de la piel y de los riñones. En la prueba, se busca un grupo de proteínas llamadas autoanticuerpos que se encuentran en la sangre de las personas con lupus. No es posible diagnosticar el lupus con esta prueba por sí sola. Pero permite confirmar el diagnóstico.
Tratamiento del lupus
El lupus puede tratarse de muchas maneras. Probablemente trabajará con un reumatólogo. Este es un proveedor de atención médica que se especializa en el lupus, la artritis y en otras enfermedades inmunitarias relacionadas. Además, es posible que otros proveedores de atención médica participen en su atención. Estos incluyen proveedores de atención médica primaria y especialistas en enfermedades renales, trastornos sanguíneos, trastornos inmunitarios y problemas del corazón. Quizás también vea a un trabajador social que lo ayude a manejar su plan de tratamiento. Los objetivos del tratamiento incluyen tratar los síntomas, prevenir los ataques de la enfermedad y ayudar a reducir los daños que el lupus le causa al cuerpo.
El proveedor de atención médica podría recetarle medicamentos para ayudar a tratar los síntomas. Los medicamentos no pueden curar el lupus. Pero pueden ayudar a prevenir el daño en los órganos y mantener la enfermedad bajo control. El proveedor de atención médica le recetará uno o más medicamentos para que se sienta mejor. Tome esos medicamentos según le hayan indicado. Es posible que le den medicamentos, como los siguientes:
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Antinflamatorios no esteroides (AINE). Estos pueden usarse para ayudar a aliviar la hinchazón, el dolor y la fiebre.
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Medicamento antimalárico. Este medicamento utilizado para prevenir y tratar la malaria puede ayudar a aliviar algunos de los síntomas del lupus. Puede tratar la fatiga, los salpullidos, el dolor en las articulaciones y las llagas en la boca. El medicamento también puede ayudar a prevenir la formación de coágulos de sangre.
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Medicamentos corticosteroides (esteroides). Estos medicamentos se usan para reducir la inflamación y son útiles cuando el lupus afecta los riñones, los pulmones, el corazón o el sistema nervioso.
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Medicamentos que inhiben el sistema inmunitario. Estos pueden ayudar a tratar los síntomas graves del lupus que ha atacado a los órganos.
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Otros medicamentos. Un medicamento biológico podría ser una opción. También se están llevando a cabo ensayos clínicos para probar otros medicamentos que podrían ayudar a las personas con lupus.
Hable con los proveedores de atención médica sobre los riesgos, los beneficios y los efectos secundarios posibles de todos los medicamentos.
El manejo de la salud
El lupus también puede manejarse llevando un estilo de vida saludable. Estas son algunas maneras de cuidarse a sí mismo:
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Trate de encontrar el equilibrio adecuado entre el descanso y la actividad.
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Coma una cantidad abundante de frutas, verduras y granos.
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Mantenga un peso saludable.
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Haga ejercicio unas cuantas veces a la semana, como mínimo. Trate de caminar, nadar o andar en bicicleta.
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Aprenda a reducir o a controlar el estrés.
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Evite la exposición al sol todo lo que sea posible. Use un protector solar con factor de protección 15 o superior.
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Si fuma, deje de hacerlo.
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Manténgase informado sobre lo último que se haya publicado sobre el lupus.
Colabore con el proveedor de atención médica para controlar el lupus. Asegúrese de hacerse las pruebas y los chequeos periódicos con el proveedor.
El embarazo y el lupus
Si es una persona en edad fértil, hable con el proveedor de atención médica acerca de los riesgos del embarazo con el lupus. Se recomienda que la enfermedad esté bajo control o en remisión durante 6 meses antes de quedar embarazada. El embarazo se considera muy riesgoso para las personas con lupus que presentan algo de lo siguiente:
Los síntomas del lupus pueden desencadenarse durante el embarazo. Como un embarazo con lupus es de alto riesgo, se necesitan cuidados adicionales del equipo de atención médica. Deberá acudir a un especialista en embarazos de alto riesgo. Es decir, un ginecólogo-obstetra con formación adicional en el manejo de embarazos de alto riesgo. Es posible que deba visitar al proveedor más seguido.
Busque apoyo
El lupus es una enfermedad crónica. Esta puede poner exigencias especiales en su vida. La familia y los amigos pueden ser una buena fuente de ayuda y apoyo. Quizás también sea conveniente que se una a un grupo de apoyo para personas con lupus. Al hablar con otras personas que también tienen lupus, puede aprender nuevas manera de lidiar con la enfermedad. También es posible que no se sienta tan solo. Puede obtener más información en los siguientes sitios: